¿Por qué "Wasta" cuando el nepotismo y la corrupción están igualmente extendidos en Occidente?

15 de junio de 2021 -
Foto del barrio de los diplomáticos, al norte de Ramallah, por Bassam Almohor.

Foto del barrio de los diplomáticos, al norte de Ramala, por Bassam Almohor.

La cultura tribal árabe no inventó el nepotismo y la corrupción, pero sí desarrolló un complejo sistema de wasta. Como escribe Aseel Zimmo en la revista Arab Law Quarterly, en un artículo titulado "Wasta in Jordan: A Distinct Feature of (and Benefit for) Middle Eastern Society":

Wasta significa tanto el intermediario-interventor personal y bien conectado como el proceso de inter-mediación-intervención...Wasta significa literalmente el medio y se asocia con el verbo yatawassat, dirigir a las partes hacia un punto medio o un compromiso. Wasta se refiere tanto al acto como a la persona que media o intercede. El wasta forma parte institucional de la sociedad jordana desde su creación. Sus orígenes tribales se centraron en un papel de intermediario asociado a la prevención de represalias en conflictos interpersonales o intergrupales.

Sin embargo, aunque en un principio la wasta podía servir para mediar y resolver conflictos, se ha convertido en una hidra maligna en muchos países de todo el mundo: ¿qué no hay wasta? ¿no hay contactos? Entonces no tienes influencia para conseguir lo que quieres.

La wasta a través de sus ex señores de la guerra ha sido ciertamente costosa para Líbano, como observa el novelista Samir El-Youssef en Lebanon's Wasta Has Contributed to the Country's Collapse, donde recuerda los retos de la adolescencia y experiencias más recientes en las que la wasta fue una necesidad (véase también Lebanese Oppose Corruption with a Game of Wasta, de Victoria Schneider). Tras sobrevivir a una prisión egipcia y obtener asilo en Estados Unidos, el escritor Ahmed Naji contempla el wasta y el hecho de hacer cola en I Love Wasta and Hate Standing in Line, but I am Poor (traducción de Rana Asfour). Y el historiador de Oriente Medio Lawrence Joffe analiza cómo las familias al-Assad y Makhlouf han dominado el arte del control y la corrupción en un país diezmado por una década de guerra, en Syria's Ruling Elite - A Master Class in Wasta.

Para que no nos engañemos pensando que la corrupción a nivel de wasta es exclusiva del mundo árabe, Mischa Geracoulis, redactora colaboradora, descubre la película Push y explora la increíble codicia e inequidad del mercado especulativo de la vivienda, sobre todo en Estados Unidos y el Reino Unido, en Wasta on Steroids: Speculative Finance & the Housing Market. Establece que los "edificios oscuros" y la elusión/evasión fiscal son fenómenos universales que exacerban la falta de vivienda, negando a millones lo que la Declaración Universal de los Derechos Humanos dice que es un derecho humano: tener un hogar.

Dos contribuciones critican los resultados del wasta en Palestina, cuando el autor y abogado Raja Shehadeh relata la leyenda de un lujoso barrio de Ramala, diseñado para los héroes de la AP, en The Diplomats' Quarter: Wasta of the Palestinian Authority. Y el chef de Belén Fadi Kattan recuerda el desastre de wasta que precedió a la Nochebuena en el restaurante Fawda, en Wasta Tawla, or how the Wastafarians Fared at Fawda.

Nuestra corresponsal en Túnez, Emna Mizouni, informa sobre la crisis de vacunación agravada por la wasta, en En Túnez, la wasta mata cuando se trata de Covid-19.

TMR 10 se completa con dos relatos muy bien contados: el novelista y cineasta Tariq Mehmood teje una historia de wasta, mujeres y alcohol en Rawalpindi, en Pakistani Bureaucrats & The Booze Permit, mientras que C.S. Layla, hija estadounidense de un profesor jordano, recuerda la vida y el wasta en el viejo continente, en Vitamin W: The Power of Wasta Squared.

Le invitamos a leer, comentar y compartir estas contribuciones, en la búsqueda de una mejor comprensión del nepotismo y la corrupción que asolan las sociedades de Oriente y Occidente.

-Jordan Elgrably, editor

Jordan Elgrably es un escritor y traductor estadounidense, francés y marroquí cuyos relatos y obras de no ficción creativa han aparecido en numerosas antologías y revistas, como Apulée, Salmagundi y Paris Review. Redactor jefe y fundador de The Markaz Review, es cofundador y ex director del Levantine Cultural Center/The Markaz de Los Ángeles (2001-2020). Es editor de Stories From the Center of the World: New Middle East Fiction (City Lights, 2024). Residente en Montpellier (Francia) y California, tuitea en @JordanElgrably.

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